(Nueva York, 24 de noviembre de 2025) – Philippe Bolopion, quien cuenta con 13 años de trayectoria en Human Rights Watch y una sólida carrera previa como periodista especializado en documentar atrocidades en zonas de conflicto, ha sido nombrado director ejecutivo de Human Rights Watch, anunció hoy la organización. A lo largo de más de una década, Bolopion desempeñó diversos cargos de alto liderazgo dentro de Human Rights Watch.
“Philippe es una elección excepcional. Tiene una visión estratégica clara, una gran capacidad de liderazgo, la habilidad de representar a Human Rights Watch en cualquier escenario y los valores y la integridad necesarios para fortalecer a la organización”, afirmó Kenneth Roth, ex director ejecutivo de Human Rights Watch.
Bolopion inició su carrera como corresponsal en Kosovo, donde cubrió la brutal violencia étnica en la región, la misión administrativa provisional de la ONU y la caída del presidente serbio Slobodan Milosevic, posteriormente acusado de crímenes de guerra. Entre 2000 y 2010 fue corresponsal jefe ante la ONU para varios medios franceses, entre ellos Radio France Internationale (RFI), el diario Le Monde y el canal France 24.
“Human Rights Watch desempeña un papel crucial en responsabilizar a los perpetradores de crímenes y promover la paz y la justicia; y no tengo duda de que Philippe será un defensor vocal y decidido en nombre de las víctimas de abusos de derechos humanos alrededor del mundo”, dijo el doctor Denis Mukwege, premio Nobel de la Paz y miembro de The Elders. “Philippe fue una voz muy conocida sobre temas africanos en RFI y ha defendido con eficacia a quienes han sufrido algunas de las peores crisis del continente africano”.
Como periodista, cubrió algunas de las crisis más relevantes de su época: la antesala de la guerra de Irak y los conflictos en Darfur, Gaza, Líbano, Haití, Sri Lanka y la República Democrática del Congo. Es autor de Guantanamo: le bagne du bout du monde, un relato impactante de su visita al centro de detención militar estadounidense, al que pocos periodistas han tenido acceso y donde concluyó tempranamente que los abusos cometidos contra muchas personas constituían tortura.
“El trabajo periodístico de Philippe siempre se ha distinguido por una investigación meticulosa y sin concesiones. Está profundamente comprometido a exponer las injusticias y a hacer que los poderosos rindan cuentas”, afirmó Natalie Nougayrède, antigua ejecutiva y jefa de redacción de Le Monde. “Es un defensor intrépido de los principios fundamentales y posee agilidad e ingenio notables. Al frente de Human Rights Watch, aportará todo ese talento y energía a la defensa de los derechos humanos, una tarea más urgente que nunca”.
Tras una década documentando los esfuerzos de Naciones Unidas frente a atrocidades masivas y conflictos, en 2010 Bolopion llevó su compromiso con la defensa de los derechos humanos al ámbito internacional al incorporarse a Human Rights Watch. Primero, lo hizo como director para Naciones Unidas y, desde 2016, como subdirector de incidencia global. En estos puestos defendió los derechos de las personas atrapadas en crisis graves en Myanmar, Burundi, Sudán del Sur, la República Centroafricana, Camerún y Malí, contribuyendo a la incidencia y la investigación en el terreno.
Participó en esfuerzos clave para lograr el despliegue de una misión de paz internacional en República Centroafricana, denunció la venta de armas occidentales a Arabia Saudita, vinculadas a crímenes de guerra en Yemen, impulsó una coalición junto con aliados locales e internacionales para documentar la opresión sistemática ejercida por el gobierno israelí contra la población palestina y lideró una campaña exitosa que impidió que Rusia obtuviera un asiento en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Durante ese tiempo, también fue una voz destacada en medios internacionales en nombre de las víctimas de abusos.
Más recientemente, se incorporó a la firma francesa de gestión de activos TOBAM, donde contribuyó al lanzamiento de una estrategia de inversión centrada en los riesgos y costos que los regímenes autoritarios generan para los inversionistas.
“El enfoque eficaz de Philippe hacia el liderazgo –que he visto de primera mano en varios casos críticos relacionados con África, incluida la República Centroafricana, donde su labor de incidencia apoyó el trabajo de la Fiscalía de la Corte Penal Internacional para llevar ante la justicia a líderes de milicias— es exactamente lo que Human Rights Watch necesita en este momento”, señaló Mausi Segun, directora para África de Human Rights Watch. “Me entusiasma lo que la organización puede lograr bajo su liderazgo en un contexto en el que, para tantas personas, los derechos humanos continúan siendo una aspiración lejana”.
Bolopion asume la dirección de Human Rights Watch en un momento especialmente complejo. La democracia se ha debilitado durante dos décadas en gran parte del mundo, normas fundamentales de derechos humanos corren riesgo de erosión y continúan ocurriendo atrocidades masivas en Sudán, Gaza, Ucrania y otros lugares. Entre sus prioridades estarán movilizar nuevos recursos y reforzar el modelo de impacto de la organización: investigaciones rigurosas e innovadoras; documentación y comunicaciones que demuestren los hechos frente a la propaganda; y campañas de incidencia pragmáticas, diseñadas para aumentar el costo político de los abusos.
“El movimiento de derechos humanos enfrenta una tormenta perfecta: China y Rusia se muestran cada vez más decididas a socavar los derechos humanos a escala global, mientras que la administración Trump lanza un ataque frontal contra los pilares de la democracia estadounidense, con efectos devastadores para todo el ecosistema de derechos humanos”, dijo Bolopion. “Human Rights Watch está especialmente preparada para afrontar este desafío, demostrando los hechos, nombrando los crímenes, alertando al público y presionando a quienes tienen el poder para que responsabilicen a los perpetradores”.
